sábado, 24 de marzo de 2012

EL NOMBRE PABLO



El Judaísmo se ha incorporado a la nueva sociedad, tras la Diáspora: ahora hay muchos judíos que viven entre los gentiles, entre los no judíos, y que sin renegar de su fe ni mucho menos, han aceptado esa nueva cultura en sus aspectos más interesantes de comunicación e intercambio. Por ejemplo la lengua: Pablo (igual que todos los escritores del NT) va a escribir en griego. Nada de arameo, que era el idioma que hablaba Jesús. Esa lengua no sirve para la nueva etapa de evangelización. Hay que saber griego y escribir en griego (como hoy decimos: ¡hay que saber inglés! El griego era el inglés de la época). Así el Evangelio se expande y se comprende inmediatamente por todo el mundo romano, porque se transmite en griego. Sobre la utilización de los dos nombres, es curioso que en las cartas solo se llama "Pablo". En cambio en Hechos, se llama "Saulo" hasta 13,9 (cuando comienzan las misiones evangelizadoras); a partir de ahí es siempre "Pablo".

No hay comentarios:

Publicar un comentario